Viajando con Chester, 19 de Octubre de 2014, cuatro.
Viajando con Chester: “Marujas al poder”.
No hay color. Entre una vida muy recta y otra llena de curvas. No hay color. Entre creer en el destino o apostar por un camino. No hay color. Entre un para siempre y un mientras nos dure. Pues no. No hay color. Tú pruébalo. Prueba a arriesgarte. Porque el riesgo es el pantone de la vida. Es lo que le da color. Vale que hay que conocerlo, acotarlo y seguramente tratar de controlarlo. Pero al final, el riesgo es riesgo. La distancia entre un cobarde, un valiente y un temerario. La diferencia entre una vida de contrastes y una vida gris. La diferencia entre viajando simplemente o Viajando Con Chester.
Charla íntegra con Jorge Javier Vázquez.
En Madrid hay muchos locales, pero pocos tan emblemáticos como el Joy Eslava. Si las paredes del Joy hablasen, no se les entendería nada. Y de hablar y de entender va nuestro siguiente Chester. Catalán, licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Barcelona, Premio Shangay al mejor presentador de televisión y Premio Ondas en la misma categoría, autor del libro superventas “La vida iba en serio”. A que no parece que estemos hablando de él? Una persona que lleva casi 5 años entrando CASI TODOS los días en millones de hogares durante más de 4 horas para hablar de la vida de los demás… …a ver qué le pasa cuando alguien le aplica su propia medicina.
Charla íntegra con Celia Villalobos
Para seguir marujeando, me cambio de sexo. Si hablamos de marujas y del Partido Popular, el primer nombre que nos aparece es el de ella. Esta funcionaria del estado fue alcaldesa de Málaga antes de dar el salto al Congreso de los Diputados. Y entre sus grandes momentos, su polémica gestión al frente del Ministerio de Sanidad. Espera un momento. Una ministra de sanidad del Partido Popular liándola parda? A qué me suena esto? En fin. Seguro que en nuestra conversación ella no querrá ser la mujer de, pero oye, mira, no haberse casado con. Otra cosa. Su chófer no estará muy de acuerdo conmigo, pero a mí sus broncas me parecen hasta entrañables. Bueno, hasta que me la pegue a mí, claro.
¿Quieres recibir artículos como éste en tu buzón de e-mail? Suscríbete a ristomejide.com.